07 enero, 2009

Juan, Hermosa inocencia

Este es un bonito cuento que habla de cosas sencillas.
De la cotidianeidad y su encanto
De la candidez y de su necesidad.
De sensaciones a conseguir con pocas pertenencias.
De felicidad ante el descubrimiento no buscado y conseguido.

Y Juan, un joven con alguna deficiencia psíquica es la excusa para sacar a la luz la ternura en las personas y demostrarnos que el no cuestionarnos el miedo no implica que si el peligro acecha no se le plante cara, pues algo por encima de nuestro intelecto nos guía.


En fin, Enrique me encanto tu escrito y ¿Cómo no? El lujo de poner cara al escribiente (el etéreo se hizo carne).

Gracias por tu dedicatoria y decirte que cumple con creces la expectativa de agradable y ameno.

No hay comentarios: